Renta de alojamientos vacacionales con chimenea en Buchupureo

Excelente estadía, nos encantó la cabaña. El lugar es hermoso, tiene una piscina para refrescarse y tinaja con un costo adicional, pero vale totalmente la pena. Jovi y Gustavo sin duda unos excelentes anfitriones! Y lo mejor, son petfriendly! De serguro volveremos!!

Un lugar tranquilo para descansar y desconectarse. El terreno tiene una hermosa vista que te invita a deterner los tiempos. Gabriel muy atento de nuestras necesidades. Se agradece la amabilidad del anfitrión. Muy agradable compartir con su pequeña y con los seres que a habitan el lugar.

Muy lindo destino, una mezcla de campo y playa hermosa. La anfitriona estuvo siempre preocupada. 100% recomendable.

Una experiencia increíble en Cobquecura. La cabaña es perfecta para descansar, con un ambiente tranquilo y a pasos de la playa. Todo estaba impecable y bien equipado, ideal para relajarse y desconectarse. Lo mejor: los anfitriones, siempre atentos y disponibles para cualquier consulta, lo que hizo que la estadía fuera aún mejor. Sin duda, un lugar al que volvería sin pensarlo.

La experiencia fue completa! Llegamos justo para contemplar el sunset, la arquitectura de la cabaña es muy entretenida, los espacios están bien distribuidos, camas cómodas y muy bien equipada en general. Aprovechamos al máximo nuestra estadía, muchas gracias Jorge!

Un lugar espectacular para descansar y disfrutar del mar; hermosa vista y entorno tranquilo. Fue una experiencia maravillosa.

Fue muy agradable. Además debo destacar el entorno muy hermoso y la cabaña cumplía con todos las necesidades y comodidades para tener una grata estadía por el fin de semana para desconectarse y descansar.

La cabaña estuvo muy cómoda para nosotros 3, muy accesible, cerca de restaurantes y supermercados, tiene estacionamiento para autos, y cerca de la playa. Muy acogedora y muy atentos y muy bien atendida por su anfitrión.

El lugar y la atención fue excelente, nos quedamos el fin de semana y encontramos todo lo necesario para el viaje. El único “problema” fue que uno de los días llovió y existía una pequeña botera en el pasillo, todo lo demás extraordinario.