Renta de alojamientos vacacionales con área para fogatas en Coyhaique

Marcela es una excelente anfitriona, el entorno de su hostal es único

Fuimos muy cómodos para nuestra estancia de 2 noches en la cabaña de Barbara. La estufa de leña nos mantuvo cómodos. Se proporciona mucha madera. La cocina era más que adecuada, incluso un hervidor de agua y agua embotellada. Fue fácil cocinar todas nuestras comidas. La ducha tenía agua caliente y había una lavadora que no necesitábamos usar. Es bastante raro ver uno en el alojamiento en la Patagonia. La cama era cómoda. Barbara fue excepcional al responder a nuestras preguntas antes de nuestra estancia y durante nuestra estancia. Teníamos una señal 3g adecuada para el correo electrónico, etc. La choza está un poco destartalada, pero recuerda que el alquiler no es muy caro.

Tuvimos una estadia perfecta en la hermosa casa de Patricia. Cuenta con un patio muy bien mantenido y parrilla para hacer un fueguito. Los espacios son amplios, luminosos y acogedores y la chimenea y estufas permiten mantener la casa con una temperatura ideal. Volvería sin dudar!

Carolina es una gran anfitriona, nos respondió rápido y la casa y habitación estaban impecables. La recomendamos completamente. Además, tuvimos un problema con la pila de la llave del auto y ella nos regaló una, sin su ayuda no habríamos podido partir. Muchas gracias Carolina por todo !

Excelente Depto. Muy limpio y bien ubicado. Con todas las comodidades necesarias para pasar unas vacaciones. El anfitrión muy atento y preocupado ante cualquier necesidad. Volvería sin duda

Está en un lugar fácil de encontrar y cerca de los miradores, lo cual es ideal, ya que Coyhaique no ofrece muchos panoramas más allá de ellos. Recomiendo el lugar!

¡No queríamos irnos! Este lugar es muy tranquilo, hermoso y justo en el río. ¡La casa estaba súper limpia, las camas estaban muy cómodas y acogedoras y la cocina estaba bien surtida! Incluso pude hornear un pastel de cumpleaños para mi hija y cocinar la cena todas las noches. Las habitaciones eran un refugio cálido y acogedor para relajarse después de un día de aventura en la Patagonia. ¡La ubicación de esta casa es increíble! Tomamos nuestro café de la mañana en la terraza con vistas a Río Maniguales, tomamos los kayaks que Camila proporcionó al otro lado del río para caminar y explorar durante el día y luego tuvimos un fuego al aire libre para cocinar s'mores cada noche. ¡Este lugar es muy especial y Camila nos cuidó mucho! ¡Nos encontró una guía de pesca local, tenía bicicletas y kayaks para usar de forma gratuita e incluso nos hizo golosinas para el cumpleaños de mi hija! Me encantó el aislamiento tranquilo, la naturaleza y la pesca. A mis hijos (de 9, 12 y 14 años) les encantó el kayak, jugar con los perritos de Camila y la chimenea al aire libre. ¡Recomiendo encarecidamente este lugar especial! ¡Regresaremos!

La cabaña es muy linda, limpia y ordenada, tiene de todo para pasar un buen momento, la calefacción excelente, nos tenían leña y lo necesario para encenderla.100% recomendable

Alojamiento cómodo y tranquilo. Sugiero agregar alguna cacerola sartén destapador y una banqueta más. Destacado el orden, limpieza y buen diseño del lugar.

Un excelente alojamiento para descansar, pasear, tener una excelente experiencia la Tinaja estaba espectacular y el contacto con los animales fue una gran aventura salió todo a la perfección!!!

Marco y su señora son especialmente acogedores y preocupados de sus anfitriones. También muy flexible en nuestras solicitudes y muy preocupado de atendernos bien. El entorno es muy lindo y tranquilo. La cabaña estaba calentita cuando nos recibieron y cuenta con lo necesario. Muy acogedores.

La cabaña principal es excelente, vistas inmejorables! La segunda tiene mucho potencial y es super servicial. Barbara es una gran anfitriona, muy preocupada y amigable. Muy bueno para un pequeño retiro a la naturaleza con esos bellisimos alrededores!

Cabaña maravillosa! Todo Impecable y limpio, ubicada en un entorno precioso con vista impagable al Lago Pollux y acceso directo a este. Cercana al centro de Coyhaique pero lo suficientemente lejos para desconectarse (35-40 min).m y conocer las ciudades y pueblos aledaños. El camino es de tierra pero totalmente transitable y amigable, llegamos en vehículo 4x2. Sus dueños son un amor, nos esperaron pese a que nos retrasamos y nos acompañaron hasta el lugar indicándonos las instrucciones muy amablemente, además siempre muy pendientes de cómo estábamos. La cabaña es realmente linda, cómoda y acogedora, superó nuestras expectativas, la recomendamos al 100%.